Desde muy temprana edad comencé a soñar que todo lo que observaba se podía pintar y me imaginaba con un gran pincel coloreando con pintura al óleo el cielo, los arboles y todos los paisajes que veía.
Siempre tuve la inquietud de crear, de producir algo de la nada así que decidí estudiar Diseño Gráfico y luego Arte Puro (dibujo, pintura y escultura) pero en esa etapa de juventud era algo impulsiva, acelerada y poco paciente.
Seguí mi busqueda en las artes y estudie Orfebrería, entre otras cosas, al mismo tiempo continuaba mi busqueda interior y el tratar de calmar mi falta de paciencia y el querer ver resultados rápido de todo lo que hacía y descubrí la Fotografía para mi fue un cambio de vida total pues me brindaba la oportunidad de conectarme con la naturaleza, con los paisajes, con las calles, con las personas como lo hacia de niña para mi todo lo que observaba era arte y lo mejor fue que la Fotografía me daba la inmediatez que me gustaba pues capturaba ese único momento que no se volvería a repetir más nunca, la fotografía me ayudo a sentir paz y ser paciente y saber esperar el momento oportuno para tomar la imagen perfecta, me hizo volver a mi y sentirme serena... 
Pero mis manos seguían sintiendo la necesidad de crear y decidí retomar la Orfebrería como forma de expresión y al tener esa serenidad y tranquilidad que da el tiempo uní de alguna manera todas las formas de artes que conozco y al crear una pieza de Orfebrería primero me inspiro muchas veces en la naturaleza, como en una flor, un trébol, una mariposa, escojo piedras hermosas de la tierra y aprendo de sus facultades y a partir de esa piedra diseño un anillo o a partir de ese trébol diseño un dije y les doy ese espíritu y ese amor de donde fueron creadas que fue en mi corazón, además le tomo las fotos a mis piezas, así que en cada trabajo terminado esta implícito todas las formas de arte que estudie y que me siguen llenando de alegría y de esa pasión las cual transmito a todo lo creado por mi...